Seirei Gensouki Volumen 13 Chapter 3 - Parte 1
Chapter
3: Celos
Durante
el momento en que Rio estaba terminando su discusión con Liselotte, Hiroaki
había sido guiado a una habitación de huéspedes por Cosette, e invitó a Flora y
Roanna para aliviar su aburrimiento.
Generalmente,
Roanna sacaría un tema, Hiroaki hablaría de éste, Roanna haría una pregunta
sencilla para que Hiroaki se luzca contestándola, y de allí Hiroaki continuaría
la conversación. (TN: No entiendo por qué a Roanna le atrae Hiroaki.)
Roanna
era una buena conversadora, respondía de manera que hacía sentir bien a la otra
persona, por lo que para Hiroaki, realmente era alguien agradable con quién
conversar.
"Había
pensado que mi sentido del espacio personal era bastante grande, pero supongo
que nunca se puede saber," Dijo Hiroaki sentado en el pequeño sofá para
tres personas. Flora y Roanna tomaron asiento una a cada lado de él, mientras
tenía sus brazos abiertos. (TN: Pobre Flora : c)
Normalmente,
se sentarían en sofás individuales, o compartirían uno para tres entre dos
personas mientras la otra se sienta en uno individual, pero las habitaciones
para invitados en la fortaleza solo contaban con el mínimo de muebles.
"Bueno,
sentémonos," Hiroaki dijo, posicionándose en medio del sofá y llamando a
Flora y Roanna, resultando en los tres sentándose juntos.
"Espacio
personal?" Roanna reaccionó a las palabras de Hiroaki, inclinando su
cabeza.
"Ah,
es la distancia en la que otras personas están demasiado cerca como para estar
cómodo. Mientras más cerca la persona, más corta es la distancia, y mientras
menos la conozcas, más incomodo es. No quisieras estar sentada aquí con un
viejo cualquiera, ¿verdad?"
"En
efecto, preferiría declinar algo así...Pero no me opongo a la situación
presente," Dijo Roanna, acercándose más al hombro de Hiroaki. Mientras que
Flora mantenía una tímida distancia que evitaba el contacto con el cuerpo de
Hiroaki.
"Solía
tener un gran espacio personal, encontraba desagradable cuando alguien entraba
a un restaurante vacío después de mí y se sentaba en mi campo de visión. Pero
no me desagrada la situación actual," Hiroaki añadió, sujetando el hombro
de Roanna y acercándola a él.
"Vamos,
eso es porque se trataba de un hombre, ¿verdad?" Roanna reprochó adorablemente.
"Nah,
hay veces que también lo odio cuando es una mujer. Especialmente cuando hay
asientos disponibles y a propósito se sientan cerca de mí. Solo quiero comer en
paz, pero entonces comienzan a hablar de cosas tontas."
"A
que te refieres con eso...?"
Uno
podría decir que ella estaba preguntando si no le gustaba tenerla tan de cerca.
"Me
pregunto?" Hiroaki sonrió, evadiendo la mirada de Roanna con una risa. En
ese momento, pudo sentir como Roanna se acercaba aún más. Sonrió
arrogantemente. "Es un poco apretado, pero cosas como ésta son buenas de
vez en cuando, ¿verdad?"
"Aunque
no importaría que estemos así siempre" Roanna respondió con una cara
adorable.
"Hahaha!"
Hiroaki rió fuertemente. Luego suspiró y dijo, "Realmente es bueno tener a
alguien que te entienda cuando estas cansado y aburrido. En realidad, estar con
mujeres que solo son bellas, pero tienen cero entendimiento es tan
irritante."
Quienes
venían a su mente fueron las chicas que no se encontraban en esta habitación--con
la excepción de Christina. Le desgradaba el hecho de que no trataran de
involucrarse activamente con él, el héroe. El tan solo recordarlo hizo que su
fastidio regresara.
"Quiere
decir eso que soy una mujer de entendimiento entonces?" Roanna
inmediatamente preguntó.
"Nope"
Hiroaki sacudió su cabeza. Luego añadió, "Eres una mujer de entendimiento
Y eres hermosa. Una mujer encantadora en efecto."
"Vaya,"
Roanna se sonrojó en vergüenza.
"Entonces?
¿Qué sucede contigo Flora? Has estado callada todo este tiempo."
Satisfecho con la reacción de Roanna, Hiroaki se giró hacia Flora, quien no había
participado en la conversación.
"Huh...?
Ah...No..." A Flora no se le ocurrió nada de momento. Parecía distraída,
como que su mente simplemente no estaba ahí.
"..."
Hiroaki suspiró en desaprobación.
"Umm,
estaba pensando acerca de mi hermana y Sir Haruto...me preguntaba que estarán
haciendo," Flora respondió ingenuamente con honestidad.
"Quién
sabe? Christina debería estar hablando con el Duque Huguenot, verdad? ¿Pero por
qué mencionarlo a él?" Hiroaki frunció el ceño a la mención de Haruto.
No
de nuevo, pensó.
"No,
estaba pensando que mucho debió pasar mientras viajaban juntos."
"Entre
Christina y ese bastardo?"
"No
es a lo que me refería, pero la Profesora Celia también estaba allí..."
Flora desvió.
"Hmm..."
Incluso con la mención de Celia, Hiroaki entonó con desinterés. Pero dentro de
él su disgusto se estaba acumulando.
"Es
realmente impresionante? Que haya derrotado a la Espada del Rey o como sea.
Parecía que todos estaban sorprendidos por eso," Dijo, expresando sus
dudas por las habilidades de Alfred.
"Sir
Emarle ha sido reconocido por el Rey de Beltrum como el más fuerte. Puede usar
su espada encantada para liberar fuertes cortes de luz, y su fuerza es tan bien
conocida que se dice sería degradante compararlo a una armada de un solo
hombre," Roanna dijo un poco dudosa, sabiendo que esa respuesta no es lo
que Hiroaki deseaba.
"Y
aun así, él y el bastardo de Rui fueron derrotados por ese novato recién
llegado. Ese bastardo de Rui--también me afecta si pierde de manera que manche
el nombre de los héroes," Hiroaki murmuró de mal humor.
¿Así
que la Espada del Rey usa cortes de luz para atacar? Suena a que sería más poderoso
liberar todo el poder de mi Arma Divina. Pero Satsuki perdió contra él en un
combate de práctica, y también le dio problemas a ese bastardo Takahisa. Apareció
más o menos al mismo tiempo que los héroes, y aun así está destacando más que
nosotros. A este paso, será evaluado más alto. Incluso su nombre es similar a
uno japones.
Si
solo hubiera algo que pueda hacer, pensó mientras sentía un poco de peligro por
las recientes acciones de Haruto.
Hmm.
¿Habrá algo que pueda hacer para devaluar su caracterización de protagonista?
Haciendo que pierda credibilidad o algo...
Cruzó
sus brazos, descontento, pensando silenciosamente. Mientras tanto, Roanna
sintió su humor y en silencio espero que Hiroaki empezara a hablar nuevamente,
mientras que Flora permaneció callada incómodamente.
Sería
conveniente que alguien vaya y lo derrote al menos una vez. Viendo como el
dizque más fuerte del reino--La Espada del Rey--no pudo con él, nadie en
Restoration podría derrotarlo en una batalla cuerpo a cuerpo...
Todos
eran simplemente unos inútiles: Puro nombre y nada de sustancia. No había nadie
que fuera "La cosa seria", como se diría.
Sin
embargo, aunque fuera molesto, las habilidades de Haruto Amakawa probablemente
eran reales. Hiroaki había sido testigo de cómo Haruto peleaba, y su fuerza de
combate era en efecto impresionante. No quería admitirlo, pero Haruto era
fuerte. Aun así...
¿Espera
un momento...No hay necesidad de enfrentar al bastardo en una batalla cuerpo a
cuerpo donde tendría la ventaja, verdad? Si puedo mantener la distancia
mientras solo yo lo ataco, entonces...
Una
brillante idea le vino a Hiroaki.
Eso
es--pelear en su campo no tiene sentido. El tonto de Rui también cometió el
error de enfrentarlo de cerca cuando es un usuario de arco, o eso escuché. Debe
ser por eso que perdió. Debería haberse posicionado en algún lugar ventajoso y
derrotarlo con ataque a distancia.
Hiroaki
analizó la causa de la derrota de Rui y se burló.
Atraer
a tu oponente a tu lado del campo es la mejor táctica. Dado que el poder que
obtuve es muy grande incluso en su forma incompleta, apenas y he podido probarlo
bien, ¿pero no sería él el oponente perfecto? Si digo que quisiera probar mi
habilidad, podría funcionar.
Podía
ver la manera de derrotar a Haruto Amawaka. Claro, sería un combate de práctica,
por lo que no pelearían de verdad, pero sería una buena manera de liberar el estrés.
No hay forma de saber si Haruto aceptaría el combate, pero no se perdería nada
preguntando.
Ah,
genial. Al final, soy yo quien debería destacar.
Los
únicos que pueden derrotar a los genuinamente fuertes son los que son aún más
poderosos.
"Ah,
acabo de pensar en algo. Iré a ver a Haruto."
Hiroaki
inmediatamente tomó acción.
Al
mismo tiempo, Chloe guiaba a Rio a su habitación luego de su conversación con
Liselotte.
"Aquí
es--use esta habitación. Aquí está la llave," Dijo Chloe, deteniéndose
frente a la habitación y entregándole la llave a Rio.
"Te
lo agradezco mucho, Chloe. Si no te importa que pregunte, ¿dónde se encuentran
Sara y las chicas que vinieron conmigo?" Preguntó Rio.
"Las
guíe a la habitación de allí" Chloe apuntó con su mano, señalando la
habitación donde Sara y las demás se estaban quedando.
"Entiendo.
Si me disculpas," Rio dijo, y luego empezó a caminar hacia la habitación
de Sara.
"Seguro."
¿Me
pregunto qué clase de relación tendrá con las tres? Chloe se preguntó, observando a Haruto
tocando la puerta antes de partir. La puerta se abrió, Sara asomando su rostro.
"Haruto"
"Disculpa
la espera."
"No
te preocupes. Por favor, pasa."
Después
de ese intercambio, Rio entro a la habitación mientras Chloe se alejaba
rápidamente.
"Estábamos
esperando."
"Buen
trabajo el día de hoy."
Orphia
y Alma le dieron la bienvenida a Rio sentadas desde sus camas.
"Aquí,
toma asiento."
"Gracias."
Rio se sentó en un lado del sofá para tres que le ofreció Sara.
"Hay
algo que debemos decirte, Rio." Sara usó su verdadero nombre ya que todos
lo sabían en la habitación.
"Que
sucede?"
"Ahora
que la Princesa Christina se unió a sus aliados, estábamos pensando en regresar
a la casa de piedra. Pensamos que no deberíamos involucrarnos mucho con los
nobles humanos--o políticas humanas en general," Sara empezó.
"Ya
veo...Concuerdo, eso sería lo mejor."
Las
chicas de la gente espiritual levantaban la curiosidad solo con su apariencia,
pero debieron atraer mucho la atención mostrándose como un grupo de usuarios de
espadas encantadas. Si continuaran hacia Rodania, definitivamente recibirían
alguna clase de invitación.
"Queremos
seguirte acompañando, pero..." Sara dijo preocupadamente. Orphia y Alma
también fruncieron el ceño.
"No,
me han ayudado mucho hasta ahora. Este viaje se realizará mediante crucero
encantado una vez lleguemos a Amande, así que es suficiente. Apreciaría si en
vez de eso protegieran a Miharu y Latifa."
"Por
supuesto!" Las chicas asintieron enérgicamente al mismo tiempo.
En
contraste, Rio se vio con una sombra en su rostro. "Muchas gracias. Y me
debo disculpar por el peligro que corrieron. Especialmente tú,
Orphia--resultaste lastimada."
"De
que hablas? Celia no es importante solo para ti, Haruto. También es importante
para nosotras," Dijo Sara.
"Si,
exacto," Concordó Alma.
"Ya
nos hemos recuperado por completo y nada terrible pasó. Nos alegró mucho el
poder viajar y aprender acerca del mundo contigo. No habíamos tenido la
oportunidad de viajar a pie antes, así que todo se sintió nuevo," Orphia
dijo con una brillante sonrisa.
"Pudiste
incluso hacer que Rio te cargara como una novia al final."
"Tienes
razón...Espera! ¿¡Que rayos estas diciendo Alma!?" Orphia protestó un poco
sonrojada.
Sara
observó a las dos y suspiró. "Aprendimos mucho en este viaje,
especialmente al final en la pelea con esos mercenarios. Si no nos hubieras
enseñado a pelear contra otros humanos, es posible que se nos hayan complicado
las cosas," Dijo, recordando la batalla.
"En
efecto. Es bueno que hayamos podido obtener experiencia en el campo de
batalla"
"Yup.
Y ahora sabemos que hay muchos humanos fuertes por ahí. Al cual me enfrente fue
especialmente rudo."
Alama
y Orphia añadieron con serias expresiones.
"La
Espada del Rey...Así es como lo llaman, ¿no? Por lo que pude ver en la batalla
de Rio, no podríamos derrotarlo--al menos no con la limitación de pretender que
nuestras armas eran catalizadores para la activación de hechicería,"
Analizó Sara con una mirada severa.
"Sin
embargo, si pudieran usar sus artes espirituales libremente, guerreras de su
calibre podrían dar una buena pelea. Si las cosas realmente se vuelven
peligrosas no duden en usar sus artes espirituales. No quisiera ver a nadie más
lastimado al pelear," Rio pidió con preocupación. Se llenó de preocupación
cuando al llegar vio a Orphia y Celia en el suelo ante Charles y los otros. La
aldea les había dicho que como regla deberían esconder su especie y artes
espirituales tanto como sea posible cuando partieron, pero no era algo que debieran
mantener al costo de su vida. Al menos, eso es lo que Rio creía.
"Muchas
gracias..." Sara y las demás intercambiaron miradas contentas antes de
agradecerle un poco avergonzadas. Se podían dar cuenta que Rio estaba realmente
preocupado por ellas.
"No
hay nada por lo que deberían agradecerme..." Rio dijo con una sonrisa un
poco dolida.
"Me
alegra que te hayas enojado por Celia y por mí," Orphia dijo, cerrando sus
ojos y colocando su mano sobre su estómago ya curado.
"...Era
lo correcto," Rio dijo incómodamente. De ser posible, no quería que otros
lo vieran enojado y actuando violentamente, debido a que normalmente daba una
imagen de racionalidad y humanidad. Previamente también había asustado a Ruri y
Sayo de ese modo.
"Te
vimos de un modo que jamás habíamos imaginado antes, pero te viste realmente genial,
¿sabes?" Orphia dijo con una sonrisa, viendo la cara de Rio.
"No
te burles de mi..." Los ojos de Rio se abrieron brevemente antes de
agachar su cabeza. Estaba sonriendo suavemente, avergonzado.
"Orphia
tiene razón. Me recordó a cuando protegiste a Latifa cuando esos Wyvern
atacaron la aldea," Alma concordó con una risita.
"Recuerdo
eso," Sara dijo, recordando esas memorias.
"Fue
ya hace bastante tiempo."
"Han
pasado unos 4 o 5 años desde ese entonces."
Orphia
y Alma recordaron con una mirada distante en sus ojos. Quizás por eso la habitación
se llenó de un silencio pensativo.
"Ahora
que recuerdo, ¿qué discutiste con Liselotte?" Sara preguntó, cambiando el
tema.
"Estábamos
haciendo planes para el siguiente mes. Liselotte estaba pensando en invitar a
Satsuki a su hogar y organizar una comida, y me invitó a participar junto con
todos los de la casa de piedra..." Dijo Rio.
"Oh.
Nos encantaría asistir, pero..."
"Acabamos
de decidir que no deberíamos involucrarnos con la nobleza humana y sus políticas."
A
Sara y las otras les atraía la oferta. La cantidad de políticas involucradas en
asistir a la cena personal organizada por Liselotte eran completamente
diferentes al acto de ir a Rodania, pero el hecho de que se estaban
contradiciendo era aparente. Si hubiera preguntado en otro momento, quizás la
respuesta sería diferente, pero...
"Que
hacemos?" Alma le preguntó a Sara y Orphia.
"Nos
abstendremos esta vez. Aunque participar en una comida no tenga ningún impacto político,
crear excepciones tan fácilmente podría llevar a realizar aún más en el
futuro..." Sara declaró con pesar, su tono extremadamente serio.
"Es
una pena, pero tienes razón," Orphia concordó.
"No
se puede hacer nada," Alma se encogió de hombros tristemente.
"Sin
embargo, como esta vez no participaremos, ¡definitivamente lo haremos la próxima
vez! ¡Si hay una próxima vez! ¡Definitivamente!" Sara dijo, añadiendo esa condición.
"Acaso
eso no niega el punto?" Alma se rió de Sara.
"No
hay problema! Debemos demostrar nuestra abstinencia aquí para así premiarnos la
siguiente vez por hacerlo," Sara dijo, haciendo un berrinche.
"Verdad,"
Orphia rió.
"Ah,
pero Latifa puede asistir. Probablemente estará de malas cuando regresemos a la
casa de piedra, diciendo que nos quedamos con toda la diversión. Será una buena
experiencia social el que conozca a Liselotte," Sara añadió.
"Entendido. También pienso que Latifa estará encantada. También le comentare a Liselotte acerca de lo que me dijeron," Rio asintió con una expresión gentil. Justo entonces un toque se escuchó en la puerta.
"Están
tocando?"
La
atención de todos se dirigió a la puerta. Poniéndose de pie, Sara se dirigió
hacia la ésta, abriéndola con un *clack*.
"Que
hay!" La puerta se abrió revelando a Hiroaki, parado allí con Flora y
Roanna.
"El
héroe, Princesa Flora, y Lady Roanna..." Rio inmediatamente se puso de pie,
sus ojos abriéndose con sorpresa mientras saludaba a los tres.
"Hola..."
Sara vio a los ojos de Hiroaki y asintió su cabeza en modo de saludo.
"Lamento
molestarte en medio de tu diversión--Escuche de esta señorita que estabas en
esta habitación," Hiroaki vio su alrededor y resopló. Paradas una a cada
lado suyo se encontraban una nerviosa Flora nerviosa y una incómoda Roanna. Detrás
suyo estaba Chloe, quien probablemente los guio a esta habitación; Se veía
aburrida.
"Necesitas
algo?" Rio preguntó.
"Oh,
no es mucho. Solo quisiera pedirte algo, considerando tus habilidades."
"Y
con eso te refieres a...?"
"Podrías
tener un combate de práctica conmigo?"
"Puedo
preguntar la razón del por qué...?"
Rio
lucía confundido ante el repentino reto. No estaba seguro de si debería aceptarlo.
"Bueno,
estoy seguro de que habrás escuchado las leyendas de que tan poderosas son las
Armas Divinas que posees los héroes, pero no se han presentado oportunidades
para liberar todo el poder de la mía. Se podría decir que es un poco
nuclear...Como una magia capaz del genocidio. Usarla sin cuidado podría cambiar
el terreno, causando todo tipo de desastres secundarios. Supongo que no se
puede evitar, dado que no hay forma de saber que tanto daño pueda ocurrir, pero
si no practico el sacar su poder hasta cierto punto, es posible que no pueda
controlarlo cuando llegue el momento, ¿sabes? Hiroaki se lamentó con un
suspiro, mencionando su lógico argumento."
"Buen,
supongo," Rio dijo en un tono seco, siendo incapaz de leer las intenciones
de Hiroaki. Lo que dijo no era incorrecto, pero había salido de la nada.
"Pero
si luchara con las habilidades de mi Arma Divina activadas, incluso en un
combate de práctica, alguien regular no podría ser mi oponente. Aún sin tener
intenciones de matarlos, temo que no puedan evadir mis ataques y sean
asesinados. Necesito pelear con un guerrero que sea realmente fuerte. Fue allí
cuando me di cuenta que tu serias un buen oponente, dado que derrotaste a Rui y
a la Espada del Rey. Me siento mal por pedírtelo de esta manera, ¿pero podrías
ayudarme con esto?"
"Umm...Lamento
esta petición irrazonable. Tampoco lo hemos consultado con mi hermana, así que está
bien si te niegas." Flora, quien ansiosamente había estado escuchando
hablar a Hiroaki, no pudo contenerse más y habló.
"Eh?"
Hiroaki dejó salir un sonido reflexivamente. Flora era una cobarde que
normalmente no hablaba, y aun así tuvo que hacer algo innecesario ahora. ¿Por
qué decidió hablar esta vez? ¿Debido a que involucraba a Haruto? Ese
pensamiento lo agitó.
Ya
veo. Entonces solo es él siendo egoísta. Rio pensó que era extraño que Christina no estuviera aquí
para empezar, pero ese intercambio le ayudo a darse cuenta de eso.
"No
soy merecedor de ese gran elogio. Sin embargo, si deseas demostrar el poder de tu
Arma Divina, el lugar y fecha deberán ser seleccionados cuidadosamente. No es
algo que pueda simplemente aceptar a mi discreción. Una vez obtengas la aprobación
de la Princesa Christina, con gusto aceptare," Rio dijo, alegremente dando
su consentimiento con una condición. Sin embargo, no lo estaba diciendo como
excusa diplomática para evadir causar una ofensa debido a su negación--realmente
no le importaba luchar siempre y cuando las condiciones sean adecuadas.
Es
posible que deba pelear con otros héroes en el futuro. Rui se contuvo desde el
principio de nuestra batalla, y quisiera saber más de los poderes que ocultan
las Armas Divinas.
Si
su oponente deseaba revelar su mano, entonces no sería una mala idea aceptar
esta oportunidad. No había necesidad de ganar, por lo que podría pelear con las
habilidades que la gente ya conocía que tenía, sin revelar nada nuevo. Si no
podía ganar con eso, no habría problema.
Hiroaki
parecía disgustado de que Haruto no aceptara inmediatamente, ya que se veía un
poco molesto, pero se abstuvo de decir algo más, sintiendo que sería muy
forzoso hacerlo.
"Muchas
gracias. Entonces se lo comentaremos a la Princesa Christina." Roanna dijo
sus gracias y rápidamente terminó la conversación. No debió estar de acuerdo en
decidir esto sin el permiso de Christina, ya que se veía bastante aliviada.
"Por
favor," Rio inclinó su cabeza respetuosamente, acabando la discusión.

Comentarios
Publicar un comentario
Leave your comments here