Seirei Gensouki Volumen 13 Chapter 5 - Parte 2

La mañana después de arribar en Amande...

La noche anterior, Rio y los demás se hospedaron en la mansión de Liselotte. Hoy, Sara, Orphia, y Alma, se irán por separado en orden de regresar con Mahiru y actuar como sus protectoras.

"Nos retiramos entonces."

Sara y las demás se despidieron frente a la mansión. Fueron despedidas no solo por Rio y Celia, sino también por Christina, Vanessa, Kouta y Rei, con quienes viajaron. Además, Liselotte, Flora, el Duque Huguenot, y Roanna también estaban presentes.

Estando bajo arresto domiciliario debido a la reprimenda del día anterior, Hiroaki no se encontraba presente.

"Muchas gracias por todo. Si no fuera por ustedes y Sir Amakawa, de seguro nos hubieran capturado en Cleia," Dijo Christina como despedida de parte de todos.

"No hay de qué. No quisiera parecer sarcástica con lo siguiente que vaya a decir, pero les deseamos buena suerte en sus futuras actividades." Sara respondió de parte de Orphia y Alma también.

"De verdad, muchas gracias...No pensé que nos despediríamos tan pronto," Celia dijo tristemente, sus ojos con lágrimas.

"Vamos no estés triste. Puede que nos encontremos de la nada en algún lugar," Dijo Sara.

"Sep. También quiero visitarlas nuevamente," Dijo Celia.

Orphia intervino. "Encontrémonos en otro lugar nuevamente."

"Lo estaré esperando," Añadió Alma.

"Si!" Celia asintió felizmente.

Qué pena...Me hubiera encantado recibirlas en Rodania e invitarlas a nuestra causa. Sin embargo, esa Miharu que mencionaron es intrigante--incluyendo a Sir Amakawa, ni siquiera la realeza tendría a todas estas capaces personas como guardias. También escuche que esa chica Aishia está en otro nivel...Enserio, ¿Que sucede con sus alrededores? Pensó el Duque Huguenot, mirando a Rio. 

No solo tenía poderosas habilidades milagrosas, sino que también estaba rodeado de gente brillante. Era como una tesorería de gente excepcional. Tan solo el hacerse enemigo de Rio, significaría hacerse enemigo de Satsuki, Liselotte, e incluso el Rey de Galarc en el peor de los casos--un pensamiento terrorífico. Y ahora incluso Christina estaba incluida en ese grupo.

Es posible que el incidente con Sir Hiroaki haya sido lo mejor.

Si Hiroaki hubiera llegado muy lejos con sus celos, podría haber causado una situación más problemática. Por lo que la previsión de Christina estaba en lo correcto...

En cualquier caso, hizo retirar a 5000 soldados--eso es un hecho. Su fama solo crecerá de ahora en adelante. Necesito encontrar un modo de atarlo al Restoration, Decidió el Duque Huguenot. (TN: ¿No tienen la sensación de que algo muy malo va a pasar?)

Después de despedirse de Sara y las demás, era hora de que el grupo de Rio departa. Se dirigirían a Rodania mediante el crucero encantado del Restoration. Se despidieron en el jardín de la mansión de Liselotte, igual que con el grupo de Sara.

"Te vendré a visitar luego entonces. Gracias por encargarte del asunto concerniente a Satsuki," Rio le dijo a Liselotte.

"No hay problema. Estoy seguro de que Su Majestad dará su aprobación una vez escuche de tus servicios. Espéralo con ansias," Dijo Liselotte con una risa.

"Lo estaré esperando." Rio aceptó sus palabras de alago. Sin embargo, el Rey Francois vendría a calificar este incidente mucho más alto de lo que Rio imaginaba.

"Nos vemos luego, Aria. Me alegró mucho volver a hablar contigo." Celia estaba totalmente absorbida despidiéndose de su vieja amiga.

"Lo mismo digo. Me alivió verte a salvo. Hablemos de nuevo cuando tengas la oportunidad de visitar Amande."

"Si. Podría estar visitando esta mansión nuevamente para una cena, así que hasta entonces."

"No puedo esperar," Aria sonrió gentilmente y Celia asintió. A corta distancia, las colegas de Aria--incluyendo a Cosette y Natalie--observaron.

"Así que Aria realmente tenía amigas fuera del trabajo."

"Verdad? Pensé que el trabajo era su amigo."

Sorprendidas del rostro que Aria normalmente no mostraba, las ayudantes susurraban curiosamente entre ellas.

"Puedo escucharlas, ¿saben?" Aria dijo fríamente.    

Esa misma tarde, Rio y los demás finalmente arribaron a Rodania. Luego de aterrizar en el lago gigante junto a la ciudad fortaleza, navegaron hasta el puerto.

La tripulación rápidamente preparo las cosas para que finalmente pudieran desembarcar. Primero salieron las hermanas reales, Christina y Flora, acompañadas por Vanessa, cruzando la rampa que conectaba con el puerto.

Siguiéndolas estaban Rio, una Celia escondiendo su rostro con una capucha, Kouta y Rei, luego el Duque Huguenot, Roanna, y Hiroaki. Celia estaba ocultando su rostro debido a que Charles aun no sabía que ella estaba viajando con ellos. Charles desembarcaría después de ellos y no sería bueno que se diera cuenta de que Celia se encontrara allí e hiciera una escena de camino a la prisión, por lo que decidieron ocultar su rostro por el momento.

Un crucero encantando había sido enviado con anticipación para anunciar la llegada de Christina, por lo que los nobles de alto rango del Restoration se encontraban alineados en una fila en el puerto. Cuando vieron a Christina detrás de Vanessa, posicionaron sus manos en sus pechos e hicieron una reverencia en señal de respeto.

"Whoah..."

"Increíble."

Kouta y Rei se abrumaron debido a la situación. Era la princesa quien estaba recibiendo el respeto, pero de igual manera les dio la ilusión de que se habían convertido en personas importantes también. Hiroaki debió haber recibido esta cantidad de respeto desde que llego a este mundo, por lo que su arrogancia cobró sentido. Aunque de momento estaba bastante callado...(TN: No va ser después de los putazos que le metieron.)

No lo habían pensado mucho durante el viaje que realizaron mientras huían, pero fue en este momento en el que recordaron que Christina realmente era una princesa.

Luego, un hombre vestido más elegantemente que el resto, avanzó del grupo de nobles que se había reunido para dar sus saludos. Era el marqués de Rodan.

"Bienvenida, Princesa Christina," Saludó, colocándose en frente.

"Gracias por la recepción," Dijo Christina mientras observaba sus alrededores.

Presentándose en un vestido que tomo prestado de Flora, se veía hermosa y ordenada, emitiendo un imponente sentido de realeza. No es que estuviera presumiendo de sus encantos, pero los jóvenes nobles fueron de igual manera cautivados por su belleza.

"No merezco esas palabras. Hemos estado esperando este día con todo nuestro ser. Según nuestros reportes, escuchamos que Su Alteza ha tomado como prisioneros a Charles, mano derecha de nuestro archienemigo el Duque Arbor, y a Sir Alfred Emarle, la Espada del Rey. ¡En efecto esplendido!" El Marques Rodan alagó a Christina fuertemente.

"La captura de Charles y Alfred fue el trabajo de Sir Amakawa. Asegúrese de darle una cálida bienvenida como invitado del estado."

"Como desee," El Marques Rodan hizo una reverencia.

"Ahora...No podemos dejar que Su Alteza hable estando de pie por más tiempo. Cambiemos de ubicación. También debo preparar la bienvenida."

"Si. Pero primero, ¿Puedo confiarte el transporte de los prisioneros?"

Christina se giró hacia el crucero encantado detrás de ella. Alfred y Charles aparecieron sobre la rampa, con grilletes.

"Ooh..."

Los nobles hicieron ruido al ver eso. Ambos eran figuras bien conocidas en Beltrum--Alfred siendo el caballero más fuerte del reino. Ya habían recibido noticias de esto por los reportes, pero verlos como prisioneros de cerca fue igual de sorprendente.

Alfred ignoro las miradas, parándose con dignidad.

"Guh..." Charles aparto sus ojos, su rostro lleno de humillación.

"Llévenselos," Dijo el Duque Huguenot, ordenándole al caballero que los guiaba con las cadenas conectadas a los grilletes.

"¡Si, Señor!"

Los caballeros los jalaron con las cadenas sobre la rampa. Llevándolos a otra parte bajo la mirada del público.

Después de observar eso, Rio y los demás también empezaron a caminar.

Después de eso, Rio y los otros se reubicaron en la casa de huéspedes a un lado de la mansión del Marques Rodan. Una pequeña fiesta se llevaría a cabo en una habitación. Aún era de tarde, pero tomando en consideración la fatiga del viaje, se decidió realizar la fiesta de bienvenida sin esperar las horas de la noche.

Los invitados fueron reducidos al mínimo, con la participación limitada a unos cuantos nobles seleccionados por el Duque Huguenot y el Marques Rodan. Sin embargo, aun así, hubieron un poco más de cien nobles en el lugar del evento, sin contar a los chefs, músicos, y sirvientas, por lo que el lugar se veía lleno de gente. El formato de la fiesta era el de un buffet de pie, por lo que la gente constantemente se movía a lo largo del lugar para entablar conversaciones.

En la parte de atrás del lugar de eventos, se encontraban Christina, Flora, y Celia, al igual que el Duque Huguenot y el Marques Rodan. Incidentalmente, el que Hiroaki no estuviera se presente se explicó diciendo que no se encontraba bien. Roanna le estaba haciendo compañía.

"Sin embargo, jamás imagine que Su Alteza vendría acompañada de Lady Celia. ¡E incluso con su prometido Charles!" Dijo el Marques Rodan con curiosidad en sus ojos.

Se le explicaron los eventos del rescate igual que con el Duque Huguenot, pero estaba comprensiblemente intrigado por las circunstancias.

"La Profesora Celia es demasiado buena como para casarse con ese hombre," Dijo Christina. (TN: X2 )

"Hahaha! En efecto, Lady Celia es un genio mucho mejor de lo que él se merece." El Marques Rodan rio fuertemente, pero la fuerte curiosidad nunca dejo sus ojos.

"No podemos molestar al Conde Claire quien aún está afiliado con el gobierno principal, por lo que la afiliación de la Profesora Celia con nosotros deberá ser mantenida en secreto lo más posible de momento. Puede que sea difícil ocultarlo internamente, pero también podría interferir con las investigaciones--asegúrate de que palabra de esto no llegue oídos de Charles," Christina advirtió.

Es posible que haya espías entre ellos, así que Christina no pensaba que podrían prevenir que la información de la presencia de Celia en el Restoration le llegue al gobierno principal, pero que ese sea o no un hecho público cambiaba las circunstancias. Aparte, con Charles como rehén, nada le pasaría al Conde Claire.

"Estoy consciente. Puede contar con ello," El Marques Rodan afirmó.

"Todos los presentes han recibido la explicación y lo comprenden. Los grandes esfuerzos de Sir Amakawa también se han difundido, haciéndolo el centro de atención," Dijo el Duque Huguenot, mirando a Rio, quien estaba rodeado por jóvenes mujeres nobles a corta distancia.

Fuiste tu quien tentó a las señoritas de ir hacia él, ¿y aun así tienes el descaro de decir eso? Christina pensó con un pequeño suspiro. Banquetes como estos servían para que los nobles conozcan nuevas personas, por lo que mientras la inconveniencia no causara ningún daño, ni siquiera ella podría criticar de manera directa. Sin embargo, las técnicas seductoras de las señoritas no tendrán mucho efecto en él, considerando que normalmente estaba rodeado de mujeres jóvenes como Celia y Sara. De hecho, Rio parecía responder de forma amable, pero se veía un poco incómodo. No era solo la imaginación de Christina.

"Humph..." Celia inflo sus mejillas en un pequeño reproche.

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