Seirei Gensouki Volumen 13 Chapter 2 - Parte 1 & 2
Saludos queridos lectores. Aquí les traigo la parte 2 de la traduccion del volumen 13 de Seirei Gesouki el cual empieza con el Chapter 2. El Prologo y Chapter 1 fueron traducidos por el grupo Relictanovels. Los pueden encontrar en su Facebook https://www.facebook.com/RelictaNovels/
Tratare de traerles la siguiente parte mañana. Espero les guste mi traduccion y no duden en dejarme sus opiniones. Siganmen en Facebook https://www.facebook.com/KuroSubs-107367931058889/
Chapter 2: Reunión
Flora mantuvo
su mirada fija en su hermana hasta que no pudo controlarse mas y corrió hacia
ella. "Christina...!"
"..."
Christina también intentó caminar hacia Flora, pero se detuvo, mostrándose algo
dudosa; parecía sentirse culpable por tratarla fríamente en el banquete del
Reino Galarc.
Sin embargo,
esos acontecimientos no parecían tener importancia para Flora. Una vez alcanzó
a Christina, Flora se lanzó hacia ella.
"Por qué
estás aquí? Por qué estás con Sir Haruto...? Flora ladeó su cabeza en confusión
al ver a Christina y Rio juntos. Fue allí cuando notó a Charles y Alfred
quienes estaban apresados. "Y por qué..."
"Que
tonta...Que habrías hecho si hubiera venido para engañarte? Has olvidado como
te traté en el banquete?" Christina le susurro en el oído, un poco
avergonzada pero aún así feliz.
"Ah..."
Flora dejó escapar un pequeño sonido, debilitando el agarre en su hermana. Su
cuerpo se movió reflexivamente al ver a Christina y Rio juntos, pero pensándolo
con calma, eso se podría ver como una acción imprudente.
"Está
bien. Todo estará bien ahora. No te volveré a dejar sola de nuevo."
Christina le devolvió tiernamente el abrazo a su hermana.
Eso empujó a
Flora al borde de lágrimas. "Christina..."
"Debió ser
bastante duro para ti. Lo lamento tanto..." Christina murmuro, disculpándose
vergonzosamente.
"No, no
fue así". Flora apartó sus lágrimas con sus manos. Todos observaron lo
sucedido con pequeñas sonrisas, a excepción de uno.
"Ah,
comprendo que su reunión sea algo bueno, ¿Pero cómo que no entiendo la
situación? ¿Por qué está Haruto con Christina? y con todas esas chicas..."
dijo Hiroaki. Con su posición como héroe, él era el único capaz de interrumpir
la reunión de las princesas sin duda alguna. Sus ojos se abrieron con gran
interés al ver el rostro de Sara y las otras chicas, pero pronto notó los
rostros de Kouta y Rei, quienes eran claramente de su ciudad natal, parpadeando
en confusión. "¿Oh, ustedes dos son japoneses? No parecen ser
héroes."
Kouta y Rei se
miraron, y luego asintieron embarazosamente. "Pues, no."
"Hmm..."
Hiroaki entonó sin mucho interés. Luego giró hacia las chicas, y dirigiéndose
directamente hacia ellas, las saludó alegremente. "Ah, aún no me he
presentado. Soy Hiroaki Sakata. Soy lo que llaman un héroe, supongo."
"..."
Sara y las chicas se vieron un poco confusas, no esperando que Hiroaki se
presentara directamente hacia ellas. Lo sucedido con Hiroaki había matado por
completo la conversación. Nadie estaba seguro de cómo proceder ante tal situación,
así que un incómodo silencio se mantuvo en el aire.
"Por qué no entramos por el momento? Prepararé un lugar para ponernos cómodos y hablar, así podremos continuar esto allí," sugirió Liselotte. Y así, Rio y los demás entraron a la fortaleza.
Todos los que
viajaron con Rio se sentaron de su lado, mientras que el grupo del Duque
Huguenot y Flora se sentaron del lado de Liselotte.
En la habitación
también se encontraba Aria, asistente y mano derecha de Liselotte. Vanessa se
encontraba de pie detrás de Christina, en lugar de tomar asiento.
Incidentalmente,
Charles y Alfred fueron llevados a la prisión de la fortaleza de camino a la
sala de reuniones, para tenerlos en confinamiento temporalmente.
"Bien,
empecemos entonces. Opino que lo primero que debemos compartir son nuestras
razones de venir a esta fortaleza. ¿Todos de acuerdo?" Liselotte preguntó,
viendo alrededor de la habitación.
"Si, estoy
de acuerdo. Aunque puedo anticipar la razón del por qué Lady Liselotte se
encuentra aquí" Dijo Christina.
Como la hija de
la familia Cretia y gobernadora de la ciudad cercana de Amande, era bastante
obvio que Liselotte había venido a esta fortaleza para investigar los
movimientos de la armada de Beltrum cerca del borde. Lo que no estaba tan claro
era por qué Flora, Hiroaki, Roanna, y el Duque Huguenot se encontraban también
aquí. Christina había asumido que se encontrarían en Rodania.
"Como
dice, la razón del por qué estoy aquí es debido a los movimientos de la armada
del Reino de Beltrum cerca del borde. Sucede que la princesa Flora y sus
acompañantes se encontraban conmigo justo cuando recibí la
notificación...Cuando les comenté lo que estaba sucediendo, me hicieron saber
su deseo de querer acompañarme. Los traje aquí en mi crucero encantado bajo la
condición de que regresarían a Amande inmediatamente una vez se confirmara la
situación." Explicó Liselotte.
"Acaso
Flora y los demás tenían algo que hacer en Amande?" Christina se preguntó,
mirando hacia Flora y el Duque Huguenot.
Hiroaki tomó la
iniciativa y respondió a la pregunta de Christina. "Nope. Estuvimos dentro
de la capital de Galarc por un tiempo después de que finalizara el banquete,
pero luego pensamos en saludar a Liselotte de camino a Rodania, ya que no
pudimos despedirnos bien en el banquete."
Debido a que su
objetivo en visitar Amande era para coquetearle a Liselotte y con suerte sacar
el tema de compromiso, se vio un poco culpable al dar su respuesta.
La armada de
Beltrum apareció justo cuando llegamos a Amande, así que aún no he podido
hablar bien con Liselotte...Ugh ¿acaso esos tipos no pueden tener
consideración? Tch,
Hiroaki pensó.
"Ya veo,
ahora entiendo su situación. Entonces ahora explicaré el por qué estamos aquí…¿Está
bien si soy yo quien lo hace, Sir Amakawa?" Christina le preguntó a Rio.
La manera en cómo lo confirmaba con él antes que nada mostró que tanto respeto
le tenía.
No parecían
tener ningún tipo de relación en el banquete, así que quienes se encontraban
sentados en el lado opuesto tenían curiosidad en saber cómo habían terminado
así.
"Si, por
supuesto."
"Entonces...debo
pedirles que mantengan en confidencialidad lo que se hable aquí. Claro, yo
misma se lo reportaré al Rey Francois de Galarc en una fecha posterior, pero la
situación concierne los asuntos internos de mi reino." Dijo Christina,
manteniendo su mirada en Liselotte.
"Entiendo.
¿Debería hacer que mi asistente se retire entonces?" Liselotte asintió,
girando hacia Aria detrás de ella.
"Su
Alteza, si me permite hablar..." Celia interrumpió. Los otros podían darse
cuenta de que era una joven y hermosa mujer, incluso con su capucha cubriéndole
el rostro.
Debido a que
era la única con una capucha en la habitación, la atención hacia ella era
particularmente curiosa.
"Que
sucede?"
"Será más
conveniente que ella esté presente cuando explique mis circunstancias más
adelante, así que, aunque suene atrevido, ¿Podría sugerir que se quede?
Explicaré yo misma la situación en un momento," Celia dijo, observando a
Aria.
"Entiendo.
En ese caso, puede continuar presente," Christina dijo, estando de
acuerdo.
Aria y
Liselotte se mostraron curiosas en el repentino foco en Aria, pero ambas
estuvieron de acuerdo sin ninguna objeción.
"Bien,
yendo al punto: Todo empezó cuando Vanessa y yo escapamos de la capital de
Beltrum, con la ayuda del Conde Claire. Tratamos de dirigirnos a Rodania, donde
se encontraba Flora, por crucero encantado. Estos dos jóvenes se encontraron
como polizones en ese crucero...Son Rei Saiki y Kouta Murakumo, amigos del héroe,
Sir Rui Shigekura. Terminamos trayéndolos con nosotros, pero omitiré los
detalles de momento." Christina explicó.
"Gracias a
la ayuda del Conde, pudimos llegar hasta Cleia sin problema, pero allí es donde
las cosas se pusieron difíciles. El Duque Arbor descubrió que había escapado e
inmediatamente mandó un pelotón de búsqueda liderado por Charles. Pudimos
escondernos en una habitación secreta en la mansión del Conde, pero de allí
nuestros movimientos fueron bloqueados. Solo era cuestión de tiempo el que nos
descubrieran...y fue entonces que nos encontramos con Sir Amakawa."
"Ah...espera
un momento. ¿No es eso extraño? Su escape de la mansión Claire estaba
bloqueado, no? ¿Y se estaban escondiendo en una habitación secreta para evadir
al pelotón de búsqueda, así que como terminó el en esa habitación?"
Interrumpió Hiroaki.
"Eso es porque...Puedo
dejarle la explicación a usted?" Christina pregunto, mirando a Celia.
"Si,"
Celia asintió, removiendo su capucha por primera vez. Había secretamente
removido el artefacto que cambia el color de su cabello en el corredor luego de
que Charles y Alfred fueran apresados.
"Profesora...Celia?"
Y por supuesto,
Flora abrió su boca en shock. Roanna, que también fue estudiante de la misma
academia, tenía sus ojos bien abiertos. Incluso el Duque Huguenot parpadeó en
shock.
"Hey hey, ¿quién
es? ¿La conoces, Flora?" Hiroaki preguntó, sus ojos brillando.
"Soy Celia
Claire. Hija del Conde Claire, y pasada instructora de la Princesa Christina,
Princesa Flora y de Miss Roanna en la academia. Aria es una vieja amiga mía."
Celia se introdujo y luego miró hacia Aria mientras la nombraba.
"..."
Como asistente, Aria no dijo nada, pero sus sorprendidos ojos se encontraron
con los de Celia antes de que su boca formara una pequeña sonrisa.
Pero que
sorpresa, pensó Liselotte. Aria le había hablado
de Celia, así que sabía que eran amigas, pero jamás imagino conocerla en esta situación.
"¿Ah, y
que te refieres con “profesora”? Te ves de la edad de Flora y Ronna, ¿o quizás
incluso más joven?" Preguntó Hiroaki, observando en detalle a Celia.
"Muchas
gracias. Pero ya tengo veintiún años de edad," Celia dijo, dando su edad
un poco avergonzada.
"Q-Qué!? ¿¡Veintiuno!?
¡Eres mayor que yo!" Hiroaki exclamó, poniéndose de pie y haciéndose hacia
adelante espontáneamente.
"Gah..."
Kouta y Rei se vieron un poco disgustados por las palabras de Hiroaki. Ese fue
el momento en que se dieron cuenta de que él era el polo opuesto del
caballeroso Rui, el héroe que conocían.
"Jailbait...legal?"
Christina y Celia tenían expresiones confusas, inseguras del significado.
No podremos
avanzar si seguimos así.
Las
declaraciones continuas de Hiroaki, quien las hacía sin considerar el tiempo ni
el lugar, le estaban provocando un dolor de cabeza a Liselotte. Sin ninguna
otra opción, levantó la mano. "Umm"
La atención de
todos fue puesta sobre Liselotte.
"Sucede
que no estuve presente en la ceremonia, pero ¿Lady Celia no había sido
secuestrada de su matrimonio con Charles Arbor?"
"¿Por qué
está aquí...a no ser que...?" Liselotte no completo su oración y dirigió
su mirada hacia Rio con un respiro. Fue la primera persona que le vino a la
mente con la habilidad de sobrepasar la fuerte seguridad del lugar.
"Si. Yo la
secuestre," Rio asintió.
"Ya veo.
En efecto, si fuiste tu..." Liselotte entonó en comprensión.
"Sir
Amakawa prestó su habilidad en orden de reducir la influencia de la facción del
Duque Arbor" Christina clarifico, hablando como si hubiera sido ella quien
le ordeno a Rio secuestrar a Celia.
Este fue el
arreglo que discutieron anteriormente para cuando llegasen a Rodania.
Christina se
aseguró de advertir a Kouta y Rei de no decir nada antes de tomar esta decisión.
Con esto dicho, no era necesariamente una mentira.
Sir Amakawa
prestó su habilidad en orden de reducir la influencia de la facción del Duque
Arbor, a petición de Celia...la
parte omitida fue que había sido petición de Celia, no de Christina.
Christina había
dado el consentimiento de legalizar las acciones de Rio para que el secuestro
no genere problemas, pero eso no pararía a nadie de criticar a Rio y a Celia
por no tener el visto bueno de Christina durante el momento del incidente. Para
evitar eso, dirigieron la conversación con el propósito de que pareciera que
fuera Christina quien había hecho la petición.
Ingeniosamente,
Liselotte y el Duque Huguenot se dieron cuenta de lo que había pasado. Poniendo
rostros de comprensión.
"Huh?..."
Sin Embargo,
solo la reacción de Flora mostró confusión.
"¿Sucede
algo, Flora?" Preguntó Christina.
"Ah, no,
es solo que...¿Ya conocías a Sir Haruto, Christina?" Flora observó la
expresión de Rio mientras le preguntaba a su hermana.
Christina hizo
una pausa. "No nos conocíamos directamente, y hubo un poco de peligro en
el proceso, así que me temo que los eventos respecto a esa situación son un
secreto. No puedo decirte," Dijo, evadiendo la pregunta.
"Entiendo..."
Flora frunció el ceño con una mirada de frustración, mirando a Christina.
El Duque
Huguenot tomó ventaja de la pausa en la conversación, y mirando a Celia y Rio
"Déjenme confirmar, ¿Estuviste con Haruto todo este tiempo, Celia?"
preguntó.
"Si. También
estuvo presente durante el ataque en Amande, bajo el nombre de Cecilia. Aunque
evitaba que se muestre frente a otros lo más posible," Rio respondió. Esto
hizo que los ojos de Liselotte y el Duke Huguenot se abrieran.
"Hmm...Ah!
¡Verdad, estuvo allí en ese momento! ¡Esperen, pero su cabello era differente!
Aunque cambiara su estilo recogiéndolo, ¿Cómo es que tenía cabello rubio?"
Hiroaki había estado observando a Celia en detalle, pero luego de una pausa, le
apuntó con emoción y empezó a gritar. Parece que su presencia en Amande fue la
pista que le ayudo a finalmente recordarla.
"Usé un método
para cambiar el color de mi cabello"
"Heh...Bueno,
que sorpresa. Es un cambio dramático," Dijo Hiroaki con asombro.
En estos
momentos, Celia no tenía su cabello recogido a un lado como la última vez que
estuvo en Amande...Su cabello estaba suelto. Combinándolo con su diferente
color de cabello, daba una impresión muy diferente.
"Estuvimos
bastante sorprendidas cuando los monstruos atacaron Amande y no tuve más opción
que dirigirme a la mansión de Liselotte..."
Celia recordó
ese momento y sonrió un poco.
"No me di
cuenta en absoluto...Pero..." Flora susurro, mirando a Rio mientras
parecía comprender algo.
"Yo
tampoco me fijé," Roanna asintió en asombro.
"Tú
tampoco te fijaste, ¿verdad Aria?" Liselotte le pregunto a la vieja amiga
de Celia.
"Aunque
sea vergonzoso admitirlo, no. Sentí un deja-vu cuando nos despedimos, pero...No
nos encontramos mucho en la mansión, y jamás imagine que podría cambiar su
color de cabello de manera tan natural. Si hubiera tenido más oportunidades de
escuchar su voz, quizás me habría percatado," Aria respondió, analizando
las razones del por qué no se había percatado antes.
"Ya
veo...Debido a que no hay manera de cambiar el color de cabello de manera tan
natural. O al menos, no es algo que uno pensaría. Sería una gran manera de
disfrazarse en una sociedad que no sabe de esa posibilidad," Dijo
Liselotte mientras giraba hacia Celia con gran asombro.
"Exactamente.
Es por eso que pido mantener la existencia de este método en secreto. Dado que
era una emergencia, hice que su Alteza y los otros cambiaran el color de su
cabello mientras escapábamos Cleia, pero ellos no saben los detalles del método,"
Dijo Rio, poniendo en alto la curiosidad antes de que llovieran las preguntas.
"Ya
veo...Tengo curiosidad, pero está bien. No preguntare más," Liselotte asintió
con una sonrisa de rendición. Como dijo, tenía curiosidad, pero enseguida
determinó que no era información por la cual comportarse irrazonablemente ante
Rio.
"Umm...Sir
Haruto, ¿Será que también está usando ese método para cambiar el color de su
cabello?" Flora pregunto nerviosamente.
"¿Que estás
diciendo, Flora? ¿Acaso no estabas escuchando la conversación? Acabamos de
decir que ese tipo de preguntas estaban prohibidas," Dijo Christina, interrumpiéndola
por completo. El rostro de Flora palideció, haciendo que pensara en su pregunta
impulsiva.
"Me
disculpo por su rudeza, Sir Amakawa," Christina dijo con un suspiro.
"Está
bien, que no le moleste," Dijo Rio sacudiendo su cabeza con una pequeña
sonrisa.
"Nos hemos
desviado del tema, pero Sir Amakawa fue capaz de infiltrarse dentro de la habitación
secreta de la mansión Claire debido a que Celia estaba con él...como figuro ya
se habrán percatado. Luego de eso, fuimos capaces de escapar de los pelotones
de búsqueda que rodeaba la ciudad en el Condado Claire con la ayuda de Sir
Amakawa," Dijo Christina, regresando a la conversación principal.
"Huh. ¿Entonces
por qué vinieron a esta fortaleza? Se supone que se dirigían a Rodania, donde
se encontraba Flora, no?" Preguntó Hiroaki.
"Anticipamos
que la ruta más corta de Cleia a Rodania estaría fuertemente vigilada por los
pelotones de búsqueda. Además, si nos dirigíamos hacia Rodania pasando por el
Reino de Galarc, podríamos deshacernos de los pelotones de búsqueda en el
momento en que cruzáramos el borde. Sin embargo, parece que ellos fueron
capaces de prever esa ruta de escape de algún modo, emboscándonos con una gran
armada cerca del borde..." Christina pauso un momento, mirando a Rio, Sara
y las otras chicas de la aldea de espíritus.
"Gracias a
la ayuda de Sir Amakawa y sus camaradas, fuimos capaces de hacer retroceder al
enemigo y capturar a su comandante, Charles, y tomar prisionera a Alfred."
"Ah,
bueno, a este punto no dudo de la fuerza de Haruto, ¿Pero sus camaradas? ¿No
hablaras de esos 2 aburridos de allí, verdad?" Hiroaki miró hacia Kouta y
Rei antes de hacer la pregunta en dirección de Sara, Orphia, y Alma.
"Parece
que ya se han dado cuenta, pero ellas 3 son mis camaradas. Desde la derecha,
está Sara, Orphia y Alma. Las 3 son guerreras habilidosas portadoras de espadas
encantadas," Rio respondió por ellas.
"Hmm..."
Hiroaki entonó, observando a las chicas con gran interés. Sara, Orphia, y Alma incomodas
al ser observadas, evitaron el contacto visual.
"..."
Mientras tanto, Liselotte y el Duque Huguenot tenían expresiones de pura sorpresa
cuando escucharon que había otros tres usuarios de espadas encantadas
presentes.
"Wow, eso
es realmente impresionante. Todas son hermosas, y también son buenas
combatiendo." Hiroaki las halagó con intenso interés.
Todas las
chicas a mi alrededor han llevado vidas bastantes protegidas...Tener una
guerrera en el harem sería excelente. Solo teniéndolas alrededor, me protegerían, pensó para sí mismo. (TN: No puedo
aguantar más. Vaya pedazo de mierda)
"Gracias..."
Dijo Sara en representación de Orphia y Alma. Sin embargo, parecía estar
pensando en algo, ya que sonó un poco brusca. Quizás el Duque Huguenot se dio
cuenta de eso, ya que inmediatamente cambio el tema.
"Ya veo,
tal parece que ni siquiera Sir Alfred puede enfrentar a cuatro portadores de
espadas encantadas. Casi dudo de mis ojos cuando vi a Charles y a la espada del
Rey capturados como prisioneros...Que fortuito," soltó una risa. Tener a
una figura importante del enemigo, la facción Arbor, en prisión era realmente
exhilarante...Lo suficiente para hacer que risas escaparan de él al pensar en
ello.
"Eso no es
verdad," Dijo Sara repentinamente.
"A qué se
refiere?" Dijo el Duque Huguenot, con una rara cara de sorpresa.
Sara corrigió
al Duque Huguenot debido a que odiaba recibir el crédito cuando no había
contribuido en ello.
"Nosotras
simplemente ahuyentamos a los otros portadores de espadas encantadas que se
encontraban presentes. Quién derrotó a ese Alfred fue Haruto. De hecho, quién
capturo a esa persona llamada Charles e hizo retroceder a esa armada de 5000
soldados esperando en el borde fue Haruto. Y lo hizo solo."
"Oh,
vaya..." Liselotte respiro en sorpresa, cubriendo su boca con su mano. El
hecho de que Sara y las demás hayan podido repeler a otros usuarios de espadas
encantadas era lo suficientemente impresionante, pero la escala de los logros
de Rio era lo suficientemente grande como para paralizar los sentidos.
El Duque
Huguenot no podía ni hablar por el shock, pero observo a Christina, preguntándole
por una clarificación. "¿No es que dude, pero a que se refiere?"
"Es la
verdad. Sir Amakawa derroto él solo a Alfred. Mejor dicho, se enfrentó a Sir
Rui Shigekura y a Alfred en un combate dos contra uno...y ganó," Christina
clarificó.
"Se
enfrento a un héroe y a la espada del Rey...y ganó?" Tal parece que ese
hecho era algo que el sentido común del Duque Huguenot no podía procesar. Se
congelo, quedándose sin palabras.
"¿Así que
le gano a ese desagradable bastardo guapetón, huh...?" Las cejas de
Hiroaki se torcieron en reacción.
"Desagradable?"
Cortés y
caballeroso. Esa era la impresión que tenían de él luego de verlo conversar con
Rio, así que el escuchar la opuesta opinión de Hiroaki causó que Sara y las demás
inclinaran sus cabezas en confusión. Mientras que, Kouta y Rei se reían de la
mala reputación dada a su amigo y Kouhai respectivamente. (TN: El termino es
underclassman pero no encuentro un equivalente en español así que lo puse como
Kouhai. Si alguien sabe me lo puede hacer saber.)
"Espero
que esto haya clarificado todo por su parte, Lady Liselotte. Esa es la razón de
que nuestra armada estuviera ubicada tan cerca del borde. Aunque su objetivo
era el de capturarme y que ahora ya se han retirado, eso no cambia el hecho de
que hayan provocado a su reino. Debimos haber causado muchos problemas a usted
y a su padre. Le ofrezco mis sinceras disculpas." Christina miró a
Liselotte e inclinó su cabeza profundamente. Era extremadamente raro que una
princesa inclinara la cabeza ante un noble de otro reino, pero esta
extremadamente rara excepción se había generado debido a su propia culpa.
Inclinó la cabeza como la princesa de su reino.
"Para
nada. Por favor, levante su cabeza," Liselotte le habló a Christina
apresuradamente. Christina pausó un momento, luego alzó su cabeza lentamente.
"Gracias."
Liselotte exhalo en alivio. "Dejando eso a un lado, ¿Me pregunto cómo pudieron detectar los movimientos de su Alteza? Si los estuvieran rastreando desde el momento en que dejaron Cleia, entonces deberían haber tenido muchas más oportunidades de emboscarlos sin tener que esperar a que alcanzaran el borde," Se preguntó en voz alta.
"La razón más
grande es que simplemente no tuvieron el tiempo, diría yo. Cada tres días, Sir
Amakawa y su grupo usaron sus espadas encantadas para fortalecer sus cuerpos y
cargarnos mientras corrían, lo cual acorto substancialmente nuestro tiempo de
viaje. Cuando el enemigo se enteró de nuestra posición, ya estábamos a tres días
del borde. Después de considerar nuestra movilidad y capacidad de combate,
debieron haber querido evadir rodearnos en un bosque o área montañosa donde podríamos
rápidamente escondernos," Dijo Christina, dando su razonamiento lógico.
"En
efecto, esa área de colinas es perfecta para esconder tropas al pie de éstas,
mientras que se puede observar a cualquiera que trepe por ellas. Si tuvieran
Grifos volando, escapar resultaría difícil también..." Dijo Liselotte
pensativamente, recordando la geografía del área. "Pero incluso teniendo
en cuenta eso, posicionar una armada tan cerca del borde es una estrategia
bastante audaz."
"Si. Es
por eso que pensamos que había algo más detrás de esa estrategia,"
Christina asintió, luego frunció su ceño en frustración.
"Audaz y
astuto...Podrá ser arrogante, pero ese Charles Arbor parece que es un buen
comandante," Dijo Liselotte dándole crédito a Charles.
"Me
pregunto...Esta es la opinión de Sir Amakawa, pero también estoy de
acuerdo...Puede que Charles haya sido convencido de colocar la armada tan cerca
del borde por un hombre llamado Reiss. El verdaderamente astuto detrás de
Charles es ese hombre" Christina mencionó el nombre de Reiss por primera
vez.
"Reiss...?
No es ese el nombre de..."
"El hombre
misterioso que previamente apareció ante la Princesa Flora y Haruto cuando
Amande fue atacada, ¿verdad? y es también el nombre del embajador del Imperio Proxia..."
Liselotte y el
Duque Huguenot recordaron el momento en que la Princesa Flora fue secuestrada
durante la conmoción del ataque en Amande.
"Si.
Necesitaremos investigar a Charles un poco más, pero ese hombre es
probablemente el embajador del Imperio Proxia," Christina lo señalo con
certeza.
"Lucius
Orgueil, era? El hombre que secuestro a la Princesa Flora, el objetivo de
venganza de Haruto, y un antiguo noble del Reino de Beltrum, ahora líder de los
Heavenly Knights. Consideré el intento de secuestro de la Princesa Flora como
un acto de resentimiento, pero si está conectado al embajador del Imperio
Proxia y a Charles, entonces hay posibilidad de que la facción del Duque Arbor estuviera
envuelta en el secuestro de la Princesa Flora," el Duque Huguenot
mencionó, sacando el nombre de Lucius.
"Puede ser
muy prematuro decidir eso...Sin embargo, interrogaremos a Charles acerca de eso
también. Aunque también es posible que el Duque Arbor estuviera envuelto y que
Charles no sepa nada. No deberíamos esperar nada." Dijo Christina con un
fuerte suspiro.
Como la
Princesa Christina dijo, no podemos esperar mucho. Si Charles no sabe nada
acerca de Lucius, entonces la única pista que queda es Reiss. Si ese hombre es
el embajador del Imperio Proxia, entonces es más que posible que Lucius también
esté conectado al Imperio Proxia...
Rio comenzó a
pensar en donde se podría encontrar su archienemigo. No podía ignorar la implicación
de Reiss de que Lucius aún está vivo...Tendrá que acabarlo definitivamente la próxima
vez.
"Fuera de
eso, ¿Acaso dijo que el objetivo de venganza de Sir Amakawa es el líder de los
Heavenly Lions?" Gran sorpresa se vio en los ojos de Christina mientras se
enfocaba en Rio.
"Bueno, sí.
Es el hombre que asesino a mi madre cuando era niño," Rio confirmó, dando
una corta respuesta, como para esconder el nudo en su garganta.
"Oh...es así..."
Christina guardó silencio y no preguntó nada más. Probablemente leyó el
ambiente, su expresión puesta como si estuviera pensando en algo.
"Quisiera
interrogarlo acerca de Lucius, así que, ¿Podría asistir a su interrogación también?"
Como su conexión
con Lucius fue mencionada, Rio uso la oportunidad para hacer su petición.
Christina cerró
sus ojos y asintió lentamente. "Entiendo. En ese caso, no hay
problema."
"Muchas
Gracias," Rio bajó su cabeza respetuosamente. Observándolo a un lado con
una expresión relativamente conflictuada, estaban Sara, Orphia y Alma. Debían
estar curiosas por su conexión con Lucius. Flora tenía una expresión similar
mientras observaba a Rio.
Christina pareció
notar la mirada de Flora, pero actuó como si no se hubiera dado cuenta mientras
observaba alrededor de la habitación. “Hay alguna otra pregunta?"
"Ah, sí.
Sara dijo algo de que Haruto hizo retroceder a una armada de 5000 soldados,
pero no entiendo bien eso. Sería una cosa si fuera un héroe con un Arma Divina
como yo...Pero si fue contra Alfred y ese bastardo Rui, no es posible que haya
podido derrotar a 5000 personas encima de eso al mismo tiempo, ¿verdad? Tengo
curiosidad acerca de cómo fue esa batalla exactamente," Hiroaki observó a
Sara y pregunto acerca de esa batalla.
"Los 5000
soldados actuaron como una muralla humana ante el borde. Simplemente observaron
en silencio mientras Sir Amakawa batallaba con Alfred y Sir Rui. Cuando vieron
que ambos fueron superados, entendieron que no podrían ganar contra Sir
Amakawa, incluso aunque fueran un grupo de 5000. Fue así de terrorífico de
ver..." Christina empezó a hablar acerca de la batalla de la que fue
testigo, mientras forzaba a calmar el tumulto de emociones en su pecho. Explico
la situación de ese momento elocuentemente. "Después de que Alfred y Sir
Rui fueran derrotados por Sir Amakawa, ninguno de los 5000 soldados avanzó para
proteger a Charles, quien huyó hacia ellos. Simplemente observaron cómo su
comandante era arrastrado lejos."
"Hey hey,
acaso esos soldados eran incompetentes? Su enemigo avanzó justo al medio de su formación,
¿verdad? Esto no es una obra de teatro barata, si todos avanzan a la vez podrían
matarlo con sus números. Debe haber alguien que haya pensado eso, rayos, si yo
hubiera sido el comandante lo hubiera ordenado. Oh, ¿Habrá sido el comandante
el incompetente?" Hiroaki se quejó, aparentemente disgustado por ese
hecho.
"Los
soldados presentes instintivamente entendieron que no serían rival para Sir
Amakawa. Incluso yo sentí miedo, y era mi aliado. Así que estoy segura de que
lo que sintieron los soldados no se podría comparar conmigo. Solo los que
estuvieron presentes podrían saber acerca de ese miedo estremecedor. Podrá
sonar como una saga heroica dramatizada para aquellos que no estuvieron allí,
pero es la verdad."
Nadie querría
morir. Nadie retaría a alguien en una batalla que saben terminaría en una
muerte sin sentido. Aquellos que lo hicieran serían los que se habrían rendido
a vivir, quienes estuvieran locos, o fueran grandes tontos. Christina mantuvo
una expresión realmente seria mientras le hablaba a Hiroaki.
Ah, he
estado pensando en esto por un tiempo, ¿Pero acaso este tipo no destaca mucho?
Siempre está allí a donde voy, tomando toda la gloria. Está jugando un papel más
grande que el de un héroe, ¿Y ahora su reputación aumentara más? ¿Y frente a
Liselotte? Además, siempre tiene una mujer diferente cada vez que lo veo...¿No
me digas que todas le pertenecen, aparte de Christina y su caballero guardiana?
Tch...que decepción.
Hiroaki arrancó
los sobrantes de su corazón mientras veía desde Rio, una a una a todas las
chicas sentadas opuestas a él. Le desgradaba que el foco de la conversación no
estuviera en él, el héroe, pero sobre un caballero cualquiera.
"Debes ser
bastante bueno si puedes hacer eso. No, ¿Cómo derrotaste a Rui, debes ser mejor
que un héroe? Bueno, eso es si Rui estaba usando el poder de su Arma Divina al
100%, claro. Pero, aun así, es impresionante." Hiroaki parecía saber que
si negaba esos logros, su reputación se vería afectada, en lugar de eso, aceptó
las hazañas de Rio a regañadientes.
"Si,
pienso que ese fue un logro tremendo"
A diferencia de
Hiroaki, Liselotte ofreció su admiración sin ningún tipo de motivo oculto.
"Estoy
honrado," respondió Rio, inclinando su cabeza hacia ambos.
"Esta es
esencialmente la historia de cómo llegamos aquí, pero hay algunas explicaciones
que omití a propósito. Me gustaría intercambiar información apropiadamente por
el bien de nuestra relación con Galarc, ¿Así que, podría acompañarme a seguir
hablando, Lady Liselotte?" Preguntó Christina.
"Por
supuesto. Necesitaré dar un reporte al Rey Fracois y a mi padre también, así
que eso me gustaría." Liselotte asintió con gusto.
Y así, Christina comenzó a compartir la información que tenía.
Comentarios
Publicar un comentario
Leave your comments here