El Mago que se Alzó del Fracaso - Chapter 1 Parte 9 (Final)

 Plaza Ciudadana #3 es una de las plazas que fueron construidas en la etapa temprana de la capital. A diferencia de la plaza central, no se encontraba cerca del centro de la ciudad. Se parecía más a los parques del mundo del hombre, y estos espacios recreativos se encontraban en varias zonas de la capital.

Los niños corrían alrededor del centro mientras que las amas de casa hablaban entre ellas. Mientras tanto, la gente mayor con tiempo libre se la pasaba bien jugando un juego de mesa llamado Ajedrez de Batalla.

Como siempre, Arcus y Sue se encontraron para estudiar magia juntos. Decidiendo no ir al café, hoy se encontraban sentados en gradas de piedra. Habiendo terminado de estudiar, ahora se encontraban hablando trivialmente. Antes de que Arcus lo notara, le estaba contando la historia de su vida a Sue.

Le explico su vida como el hijo del vizconde y como ahora estaba aprendiendo magia bajo la tutela de Craib. No omitió nada en cuanto a su desherencia, por supuesto. Sue pareció no saber cómo reaccionar a eso. Sus ojos azul oscuro se entrecerraban y abrían repetidamente, no sabiendo si actuar sorprendida o disgustada.

"Así que se te negó la herencia..."

"Si, y tampoco de una manera agradable."

Todo lo que Arcus podía hacer ahora, mientras reflexionaba acerca de cómo esas personas lo trataron, era suspirar. En el mundo del hombre, de seguro hubieran sido arrestados por maltrato infantil. En estos días, hacia lo posible por evitarlos, pero incluso si se encontraba con ellos, no podían hacer mucho debido a que Noah siempre estaba a su lado. Simplemente ignoraban la existencia del otro, aunque Arcus sabía que eso no arreglaría las cosas. Sue frunció el ceño en duda.

"Dijiste que te desheredaron porque tu éter es débil, ¿verdad? Eso es raro..."

"Lo sé. Sin embargo, en lo que a ellos respecta, mis habilidades mágicas tenían que ser dignas del nombre Raytheft, es tradición."

"Aunque a mí me parece que tu magia está bien," Sue señalo.

Ella estaba en lo cierto. Desde una perspectiva normal, sus habilidades mágicas eran buenas. Hasta existían oficiales más débiles que él. El ser capaz de usar magia en primer lugar en este mundo era considerado impresionante. Después de todo, aprender la teoría y hechizos no era suficiente si no podías controlar tu éter o imaginar los efectos de tu hechizo.

"El linaje de los Raytheft es pequeño comparado a otras familias nobles," Arcus explico.

"Suena a que es un fastidio. No es tu culpa que tus ancestros hayan sido buenos en magia."

"Si...y ahora debo trabajar aún más duro debido a ello." Arcus suspiro de nuevo. No era su intención hacer que la historia de su vida terminara en quejas, pero así paso.

"Entonces por qué te esfuerzas tanto en la magia?"

"Hm?"

"Es decir, ya no eres el heredero, ¿no? ¿Así que a quien le importa que ahora seas bueno o no en magia?"

"Ah."

"¡Si fuera yo, odiaría la magia por siempre! Pero tú la amas, ¿verdad?"

Lo que decía Sue tenía sentido. Magia era la causa de todos los problemas de Arcus, por lo que tenía todo el derecho de darle la espalda. De hecho, parecía la reacción más lógica.

"Quiero convertirme en un mago famoso...y darles una lección." Aunque se sentía cohibido acerca de ello, Arcus dijo la verdad.

Sue dejo salir una risita. "Acaso eres un niño?"

"Um...sí." Arcus inflo un poco sus cachetes, pero Sue aún estaba riendo.

"Lo lamento! Eres tan maduro en otros aspectos; Simplemente lo encontré gracioso."

"Quizás no es tan buena razón, después de todo..."

Ha sido la principal motivación de Arcus todo este tiempo, aunque sabía que la venganza no era tan buena como parecía. Quería ganar poder para humillarlos. Era un poco torcido, ahora que lo pensaba. ¿Era esa realmente la clase de persona que quería ser? ¿No lo haría eso igual de terrible que sus ex padres? Mientras Arcus pensaba, Sue puso una expresión seria.

Era una expresión solemne pero tranquila--la misma que Arcus noto cuando se enfrentaron al secuestrador.

"Es una buena razón," ella le aseguro. "Mucho mejor que perder la esperanza y decidir no hacer nada. Cualquiera que sea la razón, aun sigues hacia adelante. Estas encarando tus problemas. Después de todo, pudiste huir."

"Huir?" Arcus repitió.

"Si. No tendrías que depender de tu tío, y podrías alejarte de todos a los que odias. Pero no lo hiciste, ¿verdad? En vez de eso, trabajaste para volverte más fuerte y enfrentarte a esas personas. ¡Eso es super impresionante!"

"Tenía razón. Arcus no tenía por qué rebelarse ante Joshua y Celine. No tenía por que trabajar duro. Podría haberle dado la espalda a todo y tomar el camino fácil. En vez de eso, eligió el camino de la fuerza, trabajar para desglosar todo lo que la gente consideraba normal. Aunque sus razones fueran turbias, su camino era uno de coraje y progreso."

"De verdad lo es?" Murmuro.

"Si!" Sue revelo su sonrisa usual. "Aunque pienso que hay muchas más cosas que podrías hacer aparte de vengarte de tus padres!"

"Huh?"

"Debes soñar en grande!" ella insistió.

¿A qué se refería con soñar?

"¿Cuándo hayas obtenido tu venganza, entonces qué? Si no piensas acerca de eso, entonces estarás completamente perdido una vez consigas tu objetivo."

"Ya veo..."

Finalmente, Arcus entendió lo que quería decir. En otras palabras, una vez que cumpla su objetivo, eso sería todo. Definitivamente tenía la razón en eso. A menudo se escuchaba de cómo la gente perdía su rumbo en la vida una vez cumplieran sus objetivos. Recordó a un particular amigo del hombre, quien se la paso estudiando hasta el cansancio para ingresar a cierta universidad nacional. Una vez lo logro, se desinflo por completo.

¿Quién dice que lo mismo no le podría pasar a Arcus? Su objetivo nació del resentimiento y frustración, los cuales usualmente iban de la mano con ese resultado. Si ponía su alma y corazón en su objetivo, entonces no le quedaría ninguno una vez lo lograra. Lo que necesitaba para evitar eso era otro objetivo.

"Otro objetivo..." Tenía que ser algo grande. Algo mucho más grande que su objetivo actual. "Que tal aspirar a convertirme en un mago del estado?"

Un mago del estado, al igual que su tío. Una dificultad nivel infierno que solo once personas en toda la nación han podido superar. Si eso no era grande, entonces Arcus no sabía que podría serlo. Aunque Sue parecía estar en desacuerdo.

"Hm...No sé si eso sería suficiente."

"Lo dices enserio?" Arcus pregunto.

"Si. Pienso que pasarías el examen enseguida."

"¡N-No, no podría!"

¿De dónde se le ocurrió eso? ¿Acaso no sabe qué tan difícil es convertirse en un mago del estado? Sue ignoro sus protestas, creyendo que no había necesidad de ningún debate respecto a ello.

"La vida es más divertida si te propones grandes metas. ¡Hablo de algo como convertirte en un general o uno de los nobles de más alto rango en las tierras! ¿Qué piensas?"

"No seas ridícula..."

Mientras que un general podría ser una posición adquirible, un noble de alto rango estaría fuera de cuestión. La burguesía actual generalmente heredaba su posición, la monarquía se la otorgaba debido a servicios militares, o eran realeza de otras naciones. Volverse uno en una sola generación solo sería posible a través de un logro o contribución milagrosa al estado. Mientras que Arcus lo veía como un objetivo imposible, Sue parecía haberlo decidido.

"Si! ¡Es perfecto! ¡Ahora ese es un objetivo que impresionara a todos! ¡Piensa a lo grande o regresa a casa!"

"Creo que tendré más suerte regresando a casa, gracias."

Las palabras de Arcus no parecían ser suficientes para disuadirla.

"No te preocupes! ¡Se que tan increíble eres basada en mi propia experiencia de vida!"

"Tu experiencia de vida que no es ni un año más que la mía?

Arcus recientemente se enteró que Sue era mayor que él, y desde entonces, ella algunas veces usaba ese hecho en su contra.

"Casi un año es tiempo suficiente," ella dijo testarudamente.

Arcus se vio un poco indignado.

"Como sea. Ese es el tipo de objetivo al que creo que deberías apuntar."

"Muy bien. Hare lo que pueda."

"Sep! ¡No te preocupes, porque me tendrás a mi para animarte!"

Sus palabras encendieron un pequeño fuego de confianza dentro de él. Esa era una parte de su personalidad que el encontraba alentadora. Aunque no tenía idea de cómo cumplir ese nuevo objetivo, ella hizo que sienta que podría descubrirlo eventualmente sin necesidad de esforzarse tanto.

"Ahora, si quieres realmente hacerlo, ¡debes agarrar cualquier oportunidad! Todas y cada una de ellas. ¿¡Se codicioso, okay!?"

"Esas no suenan como las palabras que diría una niña de ocho años."

"Um, hola!? ¡Casi tengo nueve, sabes!"

"Perdón, madame. Bueno, ¿qué me dices de ti?"

"Yo que?"

"No tienes algún plan para el futuro?"

"Pero claro."

"Por ejemplo?"

"Bueno, yo--" De repente, la expresión de Sue se volvió seria una vez más. "Quiero hacer fuerte a esta nación. Lo suficientemente fuerte como para dominar a cualquiera que se nos oponga."

"Que?"

"El Imperio siempre nos está despreciando. Y no solo el Imperio. Las tribus que viven en las Cross Mountains al este y la nación a lo largo de la costa sur...Cada vez que cruzamos los límites, amenazan con destruirnos, opacando nuestro poder. ¡Están tratando de provocar una guerra, alentando a los nobles y gobernantes independientes dentro de nuestros bordes! Por eso, yo..."

Había gran determinación en su voz. No estaba hablando solo por hablar. Es claro que era algo que la apasionaba. Arcus ahora estaba seguro. Debe pertenecer a una familia noble; de otro modo, no hablaría de esa manera.

Solo tenía ocho años, después de todo. Había un montón de adultos ni la mitad de apasionados que ella. Quizás Sue era mucho más madura de lo que Arcus pensaba. Su patriotismo parecía arder más fuerte que cualquier llama. No estaba satisfecha con el estatus quo, y la única solución era agarrar armas y--

"Solo bromeo!"

"Parece que has pasado por mucho. Debes pensar que somos severamente presionados por esas otras naciones para hablar acerca de cómo la nuestra debe volverse más fuerte."

"Pasar por mucho?" Sue repitió pensativamente. "Yo no...Yo no creo haber pasado por tanto..."

Qué raro. Si no había pasado por dificultades, Arcus no podía imaginar de que otra manera ella pensaría en todo eso. Ella quería aumentar la fuerza de la nación para que no sea tragada por sus vecinos. De repente, Arcus recordó algo.

"Oh, tengo algo para ti." Saco un etómetro de su bolsa.

"Que es esto?" Sue pregunto.

"Que piensas que es?" Arcus respondió con una astuta sonrisa. Si ella realmente tenía mucha más experiencia con casi nueve años, quizás podría descubrirlo.

Ella paso un tiempo estudiando el aparato, girándolo de un lado a otro, e inspeccionando cada ángulo.

"Este tubo se ve del tamaño perfecto como para meterlo por el trasero si solo se lo sacara de este marco."

"Disculpa!?"

¿Qué rayos pasada dentro de la cabeza de esta niña, y por qué tenía que ver con algo peligroso como meter un tubo de vidrio por la parte de atrás de alguien? Arcus estaba confundido.

"Huh? ¿Qué es, entonces?" pregunto Sue.

"Es un aparato para medir éter." Arcus explico. "Un etómetro. ¿No me digas que no te impresiona?"

Sue lo vio con una expresión en blanco. Luego, se congelo.

"Mide éter." Arcus repitió.

"Q-Q-Q-Queee!? Arcus! ¿¡De donde sacaste esto!?"

"Yo lo hice."

"Tú lo hiciste!?"

Sue observo el etómetro con los ojos bien abiertos. Arcus ya se había acostumbrado a ese tipo de expresión en las personas. Puso su mano sobre el etómetro.

"Mira," le dijo. "Ahora liberare éter."

"Whoah! ¡La cosa roja se está moviendo!"

"Esta es la cantidad de éter usada para la psicoquinesis. 10 de mana, para ser preciso. Mana es la unidad usada para medir el éter."

"Eso es tan cool!"

Los ojos de Sue brillaron igual a los de un niño dentro de una dulcería. En este caso, Arcus no podía culparla por su reacción. Estaba seguro de que el reaccionaria de la misma manera. Justo entonces, se notó un brillo codicioso en sus ojos. Parecía querer quedárselo. Empezó incluso a moverse inquietamente. Arcus jamás la había visto de esa manera.

"Lo lamento, pero..."

"Vamos! ¡Por favor! ¿Puedo quedármelo? Por favor, por favor, ¡por favor!"

Ni siquiera lo dejo terminar la oración antes de hacer un berrinche.

¿Qué era eso que Arcus estaba pensando acerca de la madurez de Sue?

"Lo siento," Arcus repitió, "pero no puedo dártelo."

"Eso no es justo! ¿¡Porque me lo enseñaste entonces!? ¿¡Para sacármelo en cara!?"

"Porque si no te lo decía ahora, te quejarías cuando supieras de ello."

"Duh!"

"Ugh, a veces no tengo idea de que hacer contigo."

"Bueno, primero, ¡deberías darme eso! ¡Vamos! Debería tenerlo; ¡Soy la mayor!"

"Ya te dije que no puedo dártelo!"

"Pero por qué!?"

"Porque estoy planeando presentarlo ante el público. No puedo andarlo repartiendo antes de eso."

"Oh, ya veo..." Sue aclaro su garganta. "Necesitas que eso salga bien para tus ambiciones, supongo."

Al menos se calmó, a pesar de su raro sentido de lógica. O eso pensó Arcus, pero ella aún estaba agarrando el etómetro fuertemente. Intento jalarlo como un experimento, solo para jalarlo junto con su mano. Arcus le envió la mirada más dura que podía hacer, a lo cual ella respondió con una sonrisa.

"Necesito que me lo devuelvas."

"Aww, pero--"

"Es solo hasta que haga el anuncio. Hasta entonces, puedes usarlo mientras este contigo." Arcus se comprometió.

"De verdad!? Yippee! ¡Eres el mejor!"

Luego de eso, Sue se lanzó al pecho de Arcus. Realmente debe amar la magia.

"Que blandito!"

"No de nuevo..."

Una vez más, se contentó jugando con sus cachetes.

Fin del Chapter 1

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